Geomalla/Geogrilla
Una geomalla es un material geosintético de alta resistencia utilizado para refuerzo, estabilización y separación de suelos. Se caracteriza por su estructura de malla reticular, que permite la interconexión entre la geomalla y el suelo, mejorando la capacidad portante y reduciendo la deformación.
Materiales
Las geomallas se fabrican principalmente con polipropileno (PP), polietileno de alta densidad (HDPE) y poliéster (PET).
Estructura
Su diseño de mallas abiertas permite que las partículas de suelo se entrelacen con la estructura, aumentando la resistencia y estabilidad.
Usos y aplicaciones
Refuerzo de pavimentos
Alargan la vida útil de las carreteras y caminos, reduciendo la aparición de grietas y mejorando la capacidad portante.
Estabilización de suelos
Se utilizan en áreas con suelos blandos o de baja resistencia para mejorar la capacidad de soporte.
Construcción de muros de contención y taludes
Proporcionan refuerzo estructural y ayudan a mantener la estabilidad de los taludes.
Obras de ingeniería geotécnica
Se utilizan en una amplia gama de proyectos, como rellenos sanitarios, taludes de terraplenes, y protección de taludes.
Ventajas
Reducción de costos
La utilización de geomallas puede permitir la reducción de la capa de base en pavimentos y reducir la necesidad de sobreexcavación de suelos blandos
Mayor durabilidad
Las geomallas prolongan la vida útil de las estructuras, reduciendo la necesidad de mantenimiento y reparaciones
Mayor resistencia
La interconexión entre la geomalla y el suelo mejora la resistencia del sistema, permitiendo que se soporte cargas mayores
Facilidad de instalación
Las geomallas son fáciles de instalar, lo que facilita la ejecución de los proyectos.